
El sedentarismo que impera en muchos empleos es perjudicial para la salud cardiovascular. Pasarnos muchas horas sin apenas levantarnos de la silla favorece desde la obesidad a la diabetes, y también provoca problemas cardiovasculares como infartos o trastornos cerebrovasculares, además de lesiones musculoesqueléticas.
Pero mucho más lo es trabajar de pie. Un estudio publicado en 2017 en American Journal of Epidemiology alerta de que las personas que lo hacen tienen el doble de probabilidades de sufrir un ataque de corazón o insuficiencia cardiaca.

Pero las personas que desarrollan su jornada laboral de pie no solo pueden sufrir problemas circulatorios. Como explica el fisioterapeuta, Edorta Ansoleaga, la postura que mantienen quienes apenas se mueven, produce sobrecarga estática de las extremidades inferiores y de la musculatura de la espalda, además de una tensión constante de los músculos del equilibrio y los erectores del tronco. Por eso, también estos trabajadores son candidatos para padecer dolores de columna -sobre todo en columna lumbar y cervical- o patologías de los pies, como la metatarsalgia (dolor en el antepié) o la fascitis plantar (inflamación de la fascia plantar que puede causar dolor en el talón).

«Es fundamental controlar el sudor y allí por donde andemos descalzos»
Rafael Navarro, podólogo
Para evitar lesiones o alteraciones en el sistema osteoarticular y circulatorio, se deben seguir normas posturales como:
- Mantener un pie en alto y apoyado sobre un banco o reposapiés. Alternar un pie tras otro.
- No estar de pie estático, si se puede, realizar ejercicios parado sobre tu lugar.
- De vez en cuando debemos dar algunos pasos (para favorecer la circulación) y apoyarnos en una pared.
- Si se trabaja con los brazos mientras se está de pie, hacerlo a una altura adecuada que permita apoyar los brazos.
- La cabeza debe mantenerse en el plano horizontal o flexionarse ligeramente la columna cervical.
- Evitar llevar los hombros y la cabeza adelante, ya que favorece la cifosis dorsal (joroba).
- Utilizar ayudas externas, como medias de comprensión.
- Mantener unos hábitos de vida saludable como practicar ejercicio físico, seguir una dieta saludable, dejar de fumar, etc.
Pero no todo es malo
Las investigaciones demostraron que quienes trabajaban de pie reforzaban la espalda y musculatura de las piernas. Tan solo el hecho de estar de pie ayuda a nuestro cuerpo a deshacerse del exceso de glucosa. Incluso el ritmo cardiaco es superior, unos diez latidos más por minuto. Estando de pie, se activan grupos musculares importantes como los glúteos y muslos (cuádriceps), favoreciendo la reducción de grasa en nuestro torrente sanguíneo.
Sin duda, el sentido común apunta a que el término medio sería la mejor opción. Para conseguir el bienestar de los trabajadores y evitar futuros problemas de salud, habría que poner el énfasis slot88 en que lo saludable es moverse.
Ejercicios para personas que trabajan de pie

Fuentes: